Wednesday, September 21, 2016

~ ♥ ~ La Pared



No tratas de construir una pared, no sales a construir una pared. 
No dices “voy a construir la pared más grande e imponente que se haya construido jamás”, 
no, no empiezas así. 
Dices “voy a poner este ladrillo tan perfectamente como un ladrillo pueda ponerse”
 y lo haces todos los días, pronto tienes una pared.

~ ♥ ~ La Pared



No tratas de construir una pared, no sales a construir una pared. 
No dices “voy a construir la pared más grande e imponente que se haya construido jamás”, 
no, no empiezas así. 
Dices “voy a poner este ladrillo tan perfectamente como un ladrillo pueda ponerse”
 y lo haces todos los días, pronto tienes una pared.

~ ♥ ~ Feliz


Si DIOS me pregunta que deseo: 
pediría que cada gota de lluvia se convierta en una bendición para ti, 
que cada segundo te traiga muchas razones para que seas feliz, 
que cada día aprendas a nacer como lo hace el sol, 
que sepas q los problemas nos hacen acercarnos a DIOS,
 y que tus sombras algún día ...
se convertirán en luz de medio dia y también le pido
 que proteja tu dormir, 
tu despertar y que sus ángeles estén siempre cerca de ti y tu familia.

~ ♥ ~Prometo




Prometo


No te prometo ser el amor de tu vida, ni la mujer perfecta, ni tan siquiera la chica de tus sueños. Pero prometo ser aquella que arranque de tus labios una sonrisa todos los días, esa que permanezca instalada en tu mente sin permitirte olvidarla ni por un segundo. Te prometo ser quien se desviva en amor, mimos y atenciones para ti, esa a quien no necesitaras decirle nada, porque tan sólo con una mirada sabrá lo que deseas.

No prometo, no tener arranques de celos, porque eso sería prometer no quererte, te garantizo que tendré días malos, pero puedes estar seguro que aunque en ocasiones puede que seas tú quien los provoque, igual seguiré queriéndote, escuchando y comprendiéndote. No soy la mujer perfecta, tengo miles de defectos, quizás no soy la chica de tus sueños, pero lo que sí puedo decirte es que...

Te prometo mi amor, mi compañía, mi complicidad, mis travesuras, mis locuras, mis secretos y mucho más. No puedo prometerte una relación perfecta, porque entonces no seriamos humanos, pero si puedo asegurarte que daré lo mejor de mí, para hacerte inmensamente feliz, no diré para siempre porque eso es impredecible, pero si lo haré por el tiempo que me permitas permanecer en tu vida.

~ ♥ ~ Soltando a Mama





SOLTANDO A MAMÁ.
Soltar a mamá no es dejarla de lado, ni siquiera es necesario poner distancia de por medio o privarla de compartir nuestros logros.
Soltar a mamá es, una vez que somos adultos, traerla con nosotros de este lado, a ellas les cuesta dejar el periodo de la niñez, les asusta que vayamos a equivocarnos o que no hayamos aprendido a cuidarnos, entonces, es momento de demostrar que si podemos, con hechos más que con palabras.
Soltar a mamá es mostrar que crecimos y el que crece comprende, es asumir responsabilidades, sin dejar de ver el bien común, es dejar de pedir permiso y comenzar a cumplir promesas, es cambiar regaños por no causar preocupación, es asumir riesgos sin dejar de bajar la cabeza, para pedir su bendición.
Soltar a Mamá es regresárle la misma dedicación que mostró hacia nosotros, para desvanecer sus miedos, es darle tiempo para aceptar que termino la obligación en ella y llego la convicción en nosotros: "te libero de mi, pero no te dejaré nunca porque te amo", el amor y la gratitud supera por mucho la necesidad y la costumbre.
Soltar a mamá es decir gracias, es incluirla, es ver a la mujer y respetar sus elecciones, es graduarla y darle todos los honores, es compartirle nuestros aciertos que son también los suyos, porque un adulto entiende que estaba improvisando movida por el amor y que la mayor de sus elecciones fue querernos, razón más que suficiente para honrarla toda la vida.
Soltar a mamá es comenzar a disfrutarla y con ello honrar nuestro pasado, evitemos terapias en ese sentido, estamos a tiempo, reinstalemos a nuestras madres en el mismo lugar donde estamos colocados ahora que crecimos, en el de los adultos, en el de los maduros, en el de los seres humanos, no atrás, no adelante, a nuestro lado, pues sin ella, nunca hubiéramos llegado.
Lucia Toranzo N.

~ ♥ ~ Carta de un Viejo


Carta de un viejo
Querida Julia:

No sabes lo solo que me has dejado. Sin el apoyo de tu brazo, mi andar es inseguro y vacilante. Cuando voy paseando por el parque arrastrando los pies, a veces oigo que dicen por lo bajo ¡pobre viejo! ¿Por qué? He vivido más años de los que quizás ellos vivan. He sufrido y he amado como quizás ellos no amarán nunca, pero, sobre todo, te he tenido a ti.


¿Sabes que ayer quisieron quitarme nuestra cama?, dicen que en una pequeña estaría mejor, pero me opuse firmemente, me puse como un loco y dijeron ¡chocheces de viejo! Pero ellos no saben que nuestra cama es lo último que quisiera perder, pues es el puente que me une a mis recuerdos. En una palabra, es mi mundo. Cuando a veces me acuesto aún me parece que siento el calor de tu cuerpo y si me doy una vuelta y me roza la sábana, me parece que es tu mano que acaricia mi frente.

Y a veces me despierto en mitad de la noche y me quedo asustado, sé que no estás allí, hasta que me doy cuenta de que tú me has dejado, que me estás esperando hasta que Dios quiera llevarme contigo. Ellos sólo ven una cama grande, una cama vieja, con un pobre viejo que se pierde en ella, pero no comprenden que en ella estás tú. En ella fuiste mía por primera vez, nacieron nuestros hijos y te cerré los ojos y aunque ahora estoy sólo, si cierro yo los míos el recuerdo de las noches de amor que pasamos juntos llena ahora el vacío y la soledad que me rodea.

A veces, cuando no me ve nadie, me levanto de puntillas y sin hacer ruido saco un camisón tuyo que tengo escondido en el fondo de un cajón y lo extiendo en la cama a mi lado y duermo tranquilo y feliz, pues ya no estoy sólo, pero a la mañana siguiente tengo que volver a esconderlo, sin que nadie lo vea, como si fuese un pecado, pues dirían que estoy loco. Y es que con el paso de los años me doy cuenta de lo que tú me decías y yo entonces no entendía. Que no es la pasión que es flor de un día, es la compañía lo que se añora. ¡Si te pudiera rodear con mis brazos y apretarte contra mi corazón, aunque no dijeras nada!

Julia, ahora ya soy un viejo y la gracia es que no me importa reconocerlo. Hasta ahora era un joven de setenta años. Me interesaba por el mundo que me rodeaba y los achaques de le edad no podían conmigo. Tenía un espíritu joven aunque mi cara estuviese surcada de arrugas, pero ahora, desde que tú me dejaste, estoy derrotado, vencido, ya no me interesa nada, porque este ya no es mi mundo, ya casi no nos quedan amigos ni parientes, pues poco a poco, todos se han ido yendo y en esta nueva generación yo ya no tengo sitio.

Quieren tirar la cama y no saben que es el único sitio en que no me da miedo la muerte, pues acostado en ella pienso que he sido afortunado, pues como dice el evangelio he conocido a mis hijos y a los hijos de mis hijos hasta la tercera generación. Mi vida ha sido una vida plena. Creo en Dios, y creo en la otra vida, pues en ella sé que voy a encontrarte.